Toby Valderrama, el hombre detrás de este mantra

Le dicen "el Toby", pero su nombre es Antonio Aponte. A través de la columna "Un grano de maíz", en el diario Vea, deja clara su lealtad a Hugo Chávez, aunque es un duro crítico de la burocracia. Su frase estrella es repetida constantemente por el Presidente, sobre todo en los últimos tiempos, cuando urge pedir fidelidad

Toby Valderrama es un nombre muy mencionado en el ambiente político del chavismo, aunque pocos logran dibujar los trazos de su cara. Pone su firma en la columna "Un grano de maíz" que se publica todos los días en el diario Vea, fundado por Guillermo García Ponce. Pero el reconocimiento público se lo ha dado el propio Presidente de la República, que cita como un mantra de fidelidad la frase eslogan de Valderrama: "Irreverencia en el debate, lealtad en la acción".

Chávez tiene una debilidad por Valderrama, quien se ha instituido como un pensador del proceso. La frecuencia con que lo menciona se ha hecho mayor en tiempos en que el chavismo parece estar más débil. El 10 de marzo, durante una marcha de la juventud, pidió a los jóvenes fidelidad con el proceso y aprovechó para twittear las palabras de Valderrama. "Les encomiendo mucho estudio, mucha conciencia, mucha organización, mucha unidad. ¡Irreverencia en la discusión, lealtad en la acción!", escribió en @chavezcandanga.

La incertidumbre por la enfermedad del Presidente y sus prolongadas ausencias también han coincidido con los momentos en que el líder repite la frase del Toby. El 28 de abril, durante la celebración de los dos años de su cuenta en Twitter, la dijo a través de un contacto telefónico desde Cuba. El mensaje está claro: el jefe del Estado da permiso para criticar, pero siempre dentro de la revolución.

Después de conocerse la recaída de la salud del Presidente, su hermano y gobernador del estado Barinas, Adán Chávez, tituló "Lealtad o traición" a su columna publicada el 28 de febrero en Aporrea.

org. Allí cita directamente las palabras de Valderrama para llamar al compromiso del chavismo.

"(La lealtad) implica cumplir con un compromiso de lucha, aún frente a circunstancias cambiantes y adversas; debe ser mantener el derecho a la divergencia, sin traicionar los principios que se dicen defender", escribió.

Pero en una oportunidad la persuasiva cápsula ideológica de Valderrama no tuvo el efecto esperado. Durante la transmisión del Aló, Presidente del 29 de noviembre de 2009, que se hizo desde Barquisimeto, Chávez acusó a la oposición de inventar que el gobernador del estado Lara, Henri Falcón, retiraría su apoyo al partido de gobierno y sería candidato presidencial en su contra.

"Mándalos pa’l carajo Henri, porque si no te vas a joder tú. El pueblo de Lara quiere a Henri de este lado, porque si brinca para aquel lado o empieza con ambigüedades no lo van a querer. No le facilitemos el trabajo al enemigo, debemos estar unidos", dijo. Luego pidió unión y remató: "Seamos irreverentes en la patrulla, en el partido, entre los delegados, en el congreso, entre los grupos de trabajo, de gobierno.

Pero tengamos lealtad, lealtad, lealtad". Y ya se sabe dónde está ahora Falcón.

Pero Chávez también ha sido un crítico de Valderrama. El 2 de octubre de 2010, durante una reunión del Presidente con los recién elegidos diputados del PSUV a la Asamblea Nacional, se pronunció en contra de la opinión que había emitido Valderrama en su columna titulada "¡Nos derrotaron!".

"Una holgada victoria. Que pudo haber sido mejor la victoria, sí, sí, pero de ahí a decir que nos derrotaron hay un trecho bastante largo y yo he leído hasta gente nuestra diciendo por ahí: `Nos derrotaron’; yo respeto mucho al Toby Valderrama, pero el Toby creo que está equivocado. Toby, no nos derrotaron ni nos derrotarán, más nunca nos derrotará esta burguesía escuálida", expresó.

Toby or not Toby.

El Presidente no ha sido el único en refutar a Valderrama. Su columna es un referente de discusiones internas del PSUV, el Gobierno y los grupos de base, que inundan blogs y foros en Internet.

Desde ese espacio muestra la postura política que mejor lo define: fiel al líder, pero muy crítico con el proceso. Y eso le ha costado la animadversión de algunos. Aunque las ideas de cada uno de los artículos que salen en Vea son discutidas por el colectivo Un Grano de Maíz, sólo firma Valderrama.

"A ese grupo también pertenecen el Cabo ­reconocido líder de izquierda­ y Humberto Febres, pero Toby es el corazón", afirma una fuente cercana que prefiere no identificarse.

Valderrama ha tenido encontronazos de ideas con varios voceros conocidos del chavismo. Ha relacionado a algunos miembros del partido con prácticas pequeñoburguesas y ha sido crítico del Centro Internacional Miranda, el Frente Nacional Campesino Ezequiel Zamora; Haiman el Troudi, presidente del Metro de Caracas; Víctor Álvarez, ex ministro de Industrias Básicas y miembro del Centro Internacional Miranda; Rodolfo Sanz, secretario general del Alba y ex ministro de Industrias Básicas y Minería; y Nicmer Evans, politólogo cercano al Gobierno.

En respuesta a los cuestionamientos hechos en su columna "Un grano de maíz", Rodolfo Sanz escribió, en carta pública difundida en marzo de 2010, que Valderrama "pretendía erigirse en el `fiscal ideológico’ del proceso, especie de gurú intelectual que tiene respuesta a todo y todos". Añadió en la misiva publicada por páginas web como Revolución o Muerte: "No niego tus aportes ideológicos al proceso bolivariano, sobre todo tu permanente preocupación para advertir sobre desviaciones y contrabandos que algunos intentan meterle a la ideología revolucionaria.

Pero creo, amigo Toby, que en algunos momentos incurres en excesos, incluso, tales excesos te conducen a disparar críticas injustas contra hombres y mujeres que han dado y continúan dando importantes contribuciones a este proceso".

Fue muy comentada en la web su discusión con Evans, quien le cuestionó su frase estrella. "Hace mucho daño al atacar a la gente del proceso revolucionario. Utiliza la descalificación para erigirse como único dueño de la verdad y eso espanta votos del proceso", expresa el politólogo.

Para Evans, Valderrama es una referencia interesante por su bagaje intelectual, pero considera que a veces juega a dividir en lugar de a sumar.

A Pdvsa.

Valderrama es un misterio. Muchos hablan de él, pero pocos lo conocen en persona. No respondió los emails en los que se le solicitaba una entrevista. Nadie pudo dar su teléfono ni otros datos para encontrarlo. El departamento de prensa de Pdvsa (organismo al que está vinculado) se negó a servir de enlace.

Las referencias escritas sobre este personaje son muy pocas.

Haiman el Troudi y Luis Bonilla-Molina, en Historia de la revolución bolivariana (2004), describen a Valderrama como un docente universitario y dirigente revolucionario andino.

Y para el momento de la publicación del libro lo sitúan como dirigente del movimiento político Esperanza Patriótica, del que también formaba parte Rafael Ramírez, ministro de Petróleo y Minería y presidente de Pdvsa.

A Ramírez lo conoce desde la Universidad de los Andes, quizás por eso se ha ganado su confianza y respeto. Valderrama es uno de sus principales asesores, afirma Evans. También es señalado como uno de los grandes influyentes en la organización de los obreros petroleros.

"La inspiración de los nuevos sindicatos de trabajadores petroleros es toda del Toby, él quiere dejar ahí la pureza de la revolución", asegura un funcionario que pide no revelar su nombre. No en vano, el discurso leal de Valderrama quiere sembrarse en el núcleo económico del país.